Las playas de valència estrenan la fase 2 de la desescalada con 40 personas informadoras y 80 efectivos del servicio de vigilancia

Las primeras personas usuarias que han visitado las playas de València este lunes para aprovechar tanto el inicio de la temporada de baño como el estreno de la fase 2 de la desescalada han encontrado unas cuarenta personas informadoras contratadas por el Ayuntamiento de València, a través del servicio de Playas, a Cruz Roja para que informen de todas las normas de uso y de seguridad que hay que respetar para garantizar la seguridad de todas y todos. Además, el servicio de vigilancia y socorrismo también ha dado comienzo tanto en las playas del norte como en las del sur de la ciudad.

“Estamos totalmente preparados todos los servicios municipales para que la gente pueda disfrutar de las playas”, ha explicado el edil de Playas, Giuseppe Grezzi, que ha destacado que las personas usuarias encuentran carteles informativos, además de señales que indican los accesos en las playas y también están todas las personas informadoras contratadas (25 en las playas del norte y 15 en las del sur) para facilitar durante todo el mes de junio a las personas usuarias todos los consejos y las normas que tienen que seguir así como las respuestas a todas las preguntas que tengan al respecto. “Queremos trasladar desde València un mensaje en positivo porque pensamos que todo funcionará correctamente, también con el trabajo de otros servicios municipales como el de limpieza, el de desinfección de duchas y de los lavapiés que hará Ciclo Integral del agua o la vigilancia y el control de seguridad a cargo de la Policía Local”, ha añadido Grezzi.

Los horarios del servicio de vigilancia y socorrismo, que llevarán a cabo unos 80 efectivos oscilan desde las 10 a las 21 horas en las playas urbanas y de 11 a 19 horas en las de los Pueblos de València, en el sur del núcleo urbano. Tanto en ese horario como fuera de él, el concejal ha hecho un llamamiento a la responsabilidad individual y a la colaboración de las familias para evitar, por ejemplo, los juegos con pelotas o el contacto con materiales que pasen de manos a manos de unas personas a otras y que suponen un riesgo de contagio. “Es importante hacer pedagogía, dar información y apelar a la responsabilidad de cada persona usuaria”,