Cultura
Escrita y dirigida por Adrián Novella, la obra está basada en hechos reales y propone la inclusión del público en la obra
Casi 5000 personas han votado por sus espectáculos favoritos a través de la web de los Premios Max y de la aplicación #VotaMAX
El comité organizador de los Premios Max de las Artes Escénicas ha concedido el Premio Max del Público a Joc de xiquetes (Juego de niñas), obra escrita y dirigida por Adrián Novella para la compañía teatral valenciana Bullanga. Es la primera vez que los Max otorgan este galardón especial – que se suma a los premios Max de Honor y Max Aficionado o de Carácter Social, así como a las 19 categorías a concurso-, con el que se desea reconocer el espectáculo favorito de esta temporada para los aficionados a las Artes Escénicas. Casi 5000 personas han votado a través de la página web de los Premios Max y de una aplicación móvil a lo largo de los dos últimos meses.
“Cuando nos dieron la noticia del premio no nos lo creíamos”, afirma entusiasmado el dramaturgo y director valenciano Adrián Novella. “Obtuvimos dos candidaturas (Mejor Espectáculo Revelación y Mejor Autoría Revelación) en esta XXI edición de los Premios Max, pero no logramos llegar a la final. Nos dio bastante pena. Por eso, que el público haya apostado por una obra de una compañía pequeña y que apenas lleva cuatro años en activo como la nuestra, nos hizo mucha ilusión. Lo mejor de todo es pensar que una obra en la que se hace partícipe al público ha sido reconocida por el propio público. ¡Qué bien encaja todo!”, subraya.
Los artífices del montaje Joc de xiquetes recibirán el galardón el próximo 18 de junio en la gala de la XXI edición de los Premios Max de las Artes Escénicas que organiza la Fundación SGAE, con la colaboración del Ayuntamiento de Sevilla, Sevilla Turismo, INAEM, Cartuja Center CITE, Ernst & Young y Fluge, en el nuevo espacio cultural Cartuja Center CITE de la capital andaluza.
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Basado en hechos reales
Escrita y dirigida por Adrián Novella e interpretada por Miquel Arnau, Resu Belmonte, Vicent Domingo, Gemma Taberner, Ariana Higón y Jorge Valle, Joc de xiquetes ha sido definida por la propia compañía teatral Bullanga como una “comedia amarga para público adulto”. Así, a partir de un suceso real, el montaje recrea una reunión de padres y madres en una escuela mientras que el público forma parte de la comedia al asignársele un rol para poder entrar y participar activamente en este “juego de niñas y niños”.
Mediante este formato de teatro participativo, la pieza propone una dura reflexión en torno a la comunicación o, mejor aún, a esa hiper-comunicación a la que nos enfrentamos en la actualidad y en la que nada ni nadie parecen estar a salvo. Los grupos de WhatsApp de padres y madres de los colegios son, según apunta Novella, un buen ejemplo de esos casos en los que la “tergiversación de la realidad puede acabar provocando consecuencias fatales. En cualquier caso, durante el desarrollo de la obra, nosotros en ningún momento juzgamos los hechos. Es el público el que finalmente decide si estos son reales o no. Nuestro objetivo es mostrar cómo esta mala comunicación entre unos y otros puede terminar generando una protección desmedida de los padres a sus hijos”.
Adrián Novella llegó a este modelo de teatro participativo a través de su trabajo como actor en la compañía La Cubana. Además, a su paso por el Máster en Estudios Teatrales de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), realizó una investigación sobre dramaturgias para la inclusión del público. “Analicé el trabajo que diversas compañías realizan en este campo y descubrí una fórmula para introducirlo. Es lo que yo quería hacer y, para ello, debía conseguir que el público se identificase con la historia, que entrara de lleno en ella”, cuenta. A partir de esa premisa, y echando mano de un suceso real en torno a una denuncia a un profesor por abusos, se originó esta obra galardonada con el Premio Max del Público, Joc de xiquetes.
La pieza se estrenó en 2016 en el festival teatral Russafa Escènica y, tras recorrer diversos escenarios de la Comunidad Valenciana y Cataluña, se pudo disfrutar en 2017 en el festival Tercera Setmana. Allí cosechó aplausos entusiastas; incluido el de un programador chileno que se llevó el montaje al Festival Internacional Santiago OFF. Joc de xiquetes se representó también en Perú y en los últimos meses compagina su presencia en escenarios teatrales con encuentros educativos en las aulas de colegios municipales.
Acerca de de Bullanga Compañía Teatral
Creada en 2013 por un grupo de jóvenes actores procedentes de la Escuela Superior de Arte Dramático de Valencia, Bullanga se consolidó como asociación cultural en 2015. Desde sus inicios, la compañía ha producido sus propios espectáculos, con el respaldo de un buen número de colaboradores vinculados a las Artes Escénicas: bailarines y coreógrafos, músicos y cantantes, técnicos de luz y sonido… La compañía se estrenó con La gloria del pueblo y ha seguido con títulos como El sueño de las galaxias o Maruschka. Comèdia russa sobre la nostra terreta.
Por su parte, el autor y director de la galardonada Joc de xiquetes , Adrián Novella , es miembro fundador de Bullanga, compañía con la que ha dirigido algunas de sus obras, e imparte clases de teatro en diferentes centros educativos e instituciones. La dramaturgia para la inclusión del público es la seña de identidad de sus últimas creaciones; entre ellas, Maruschka. Comèdia russa sobre la nostra terreta (Premi Micalet de Teatre 2017) o Joc de xiquetes.
Tres premios especiales
Además de las 19 categorías a concurso, este año hay tres premios especiales: Max de Honor, que ha reconocido la carrera del dramaturgo y director teatral José Sanchís Sinisterra; el Max Aficionado o de Carácter Social, en esta ocasión para Danza Mobile; y el Max Especial del Público, en el que más de 5000 personas han votado por sus espectáculos favoritos a través de una aplicación móvil y de la web de los Premios Max.
Organizados por la Fundación SGAE desde 1998, los Premios Max, cuyo galardón está diseñado por el poeta y artista plástico Joan Brossa (Barcelona-1919/1999), impulsor de uno de los colectivos renovadores del arte español de posguerra, se han consolidado a lo largo de estos años como el reconocimiento más amplio en el ámbito de las Artes Escénicas en el Estado español.