Cultura
Expertos e investigadores de diversos países están ofreciendo hoy sus diferentes visiones del Santo Grial en el marco de la XIIIª Multaqa de las culturas, organizada por el Centro Unesco Valencia en colaboración con la Fondazione Terzo Pilastro Italia e Mediterraneo, que se celebra en Valencia hasta el próximo domingo.
José Manuel Gironés, presidente del Centro Unesco Valencia, ha sido el encargado hoy de abrir las sesiones programadas durante la mañana, bajo el título ‘La ciencia y el Grial’. Gironés ha afirmado que la Unesco “con sus 70 años ya cumplidos, es hoy, más que nunca ‘un viento que sopla’. Un viento favorable a todos. Un viento esperanzador que asegura (o al menos promete) que a los hijos de nuestros hijos les alcanzará el conocer las buenas cosas que nosotros hemos tenido”, y que, con sus enfoques científicos, contribuye a distinguir la información fiable de la que no lo es. En su intervención, ‘Optima hereditas’, ha dicho que este concepto “significa para nosotros el privilegio de sentirnos particularmente señalados por el hecho de que el Santo Grial, ya reconocido por los papas como el más plausible de los señalados en la historia esté aquí, tan cerca, entre nosotros. Pero esa sería una conclusión errónea. Propensa a resbalar hacia una valoración grosera y alejada del verdadero espíritu de la Unesco que es mucho más que una burocracia para el patrimonio o la sección menos atribulada de las Naciones Unidas”.
Giuseppe Perta, investigador napolitano, ha expuesto su disertación ‘Mediterráneo de la movilidad, antes y después de Constantino’, en la que se ha referido al Mediterráneo como “la región de movilidad por excelencia” y ha destacado las referencias de estudiosos que lo definen como llanura líquida (Braudel), destacan su contribución a la conectividad (Horden y Purcell), o se refieren al mismo como factum maris (de Giovanni-Centelles), “es decir, la capacidad, de este mar en particular, de unir más que dividir, de ligar más que separar, de hacer de bisagra más que de barrera. Gironés lo ha definido como el mar de una sola orilla”.
Petra ha querido destacar la dificultad de analizar lo que forma parte del pasado: “Si queremos penetrar en el corazón de la Antigüedad tardía y la Edad Media, períodos en los que la fe de alguna manera totaliza la vida de los hombres de la época, hay que abandonar el punto de vista laico, racionalista, psoeudocientífico actual. No sé lo importante que es, para los que estudian esta época, saber si la Lanza sagrada o el Santo Cáliz conservados en el Santo Sepulcro son realmente el Cáliz de Jesús o la lanza que atravesó su costado. Lo mismo se puede aplicar a la Santa Cruz. Hay quien dice que lo hicieron a los ojos de los peregrinos. La discusión sobre la autenticidad de las reliquias, sobre la que no quiero entrar, que comienza con la Reforma Protestante de Calvino, llegó a sostener que un solo barco no habría podido transportar todos los fragmentos de la Vera Croce”. Petra ha concluido que las creencias son la consecuencia de la memoria colectiva. “La transmisión de la memoria supera la realidad. No importa, en este sentido, que un evento se haya verificado o no. Es la difusión de las tradiciones orales y escritas la que determina la suerte de los lugares sagrados y los objetos sagrados. Algunas tradiciones nacen del recuerdo de los peregrinos”.
La intervención de George Bertrand, profesor de L’Ecole Louvre, de París, se ha centrado en ‘La memoria de las cruzadas musulmana y cristiana en la arquitectura de Europa’. En ella, se ha referido al Mediterráneo como un espacio líquido atravesado por diversas culturas, centros de poder y vida comercial a lo largo de los tiempos y también al reflejo en la arquitectura de esa multiplicidad cultural que ha convivido tanto en el pasado como en el presente. Betrand ha citado múltiples ejemplos de lugares santos compartidos, visitados por creyentes de diversas religiones e incluso ateos y ha concluido que es necesario “seguir viviendo juntos en el Mediterráneo”.
Ferrán Arasa, de la Universitat de Valéncia, ha ofrecido una aproximación al Cáliz desde un punto de vista arqueológico, que indica que las tres partes que lo componen –la copa, la montura y la base- datan de etapas diferentes: el judaísmo, el cristianismo y el islamismo. Además de señalar algunas patologías de la copa (por las facetas de pulimento y una caída en el siglo XVIII), se ha referido a la montura –de oro, perlas y gemas- de estilo mudéjar gótico, que se confeccionó en un solo momento. En relación con ella ha destacado, que las asas son una influencia externa, de inspiración bizantina, de siglos anteriores). La base muestra una inscripción cúfica (un adjetivo femenino, que se podría traducir como ‘la resplandeciente’ o ‘la brillante’), que no es frecuente en copas de este tipo, como tampoco lo es su disposición casi vertical, “que resulta extraña”
Por su parte, Gabriel Songel, Catedrático de la Universitat Politécnica de València, ha querido destacar los testimonios de convivencia entre culturas que muestran algunos objetos, en los que están representados tres religiones diferentes, como el Santo Cáliz, el cuenco de la mano de Fátima, que se expone en el Museo Gonzalez Martí (que incluye dentro de la mano, una estrella judía e incluye una cruz cristiana) y el astrolabio de Al-Sahli.
Las sesiones de la mañana han concluido con la intervención del joyero Vicente Gracia, que ha diseñado el programa de la actual edición de la Multaqa, y ha ofrecido una historia imaginaria para ahondar en ‘la orfebrería del Santo Cáliz’.
Esta tarde diferentes expertos abordan sus visiones sobre ‘El grial como simbolo’, después de haber visitado ayer conjuntamente el Santo Grial en la Catedral de Valencia. Fue el broche final de la sesión de ayer en la que la filósofa Rosa María Rodríguez Magda expuso su ponencia sobre la Declaración de Valencia sobre responsabilidades y deberes humanos que fue presentada en la Asamblea General de la Unesco en 2001 y que considera hoy en plena vigencia para conseguir un mundo más justo.
Cheikh Khaled Bentounés, guía espiritual de la Tariqa Alawiyya, con su conferencia titulada ‘Vivre Ensemble’ hizo un llamamiento a la unidad de las religiones y apostó por eliminar las diferencias de derechos entre las personas haciendo especial hincapié en las mujeres y los jóvenes por ser los colectivos más vulnerables ante las injusticias. En su intervención, afirmó que la educación es la principal herramienta para erradicar la violencia y los abusos de unos seres humanos sobre otros y que los gobiernos han de implicarse en las políticas educativas para lograr ese objetivo.
Además, el secretario del Consell Valencià de Cultura, Jesús Huguet, habló sobre la poesía en el Islam valenciano y en el Mediterráneo y las influencias que esa poseía ha dejado, y el filósofo Pascual Casañ, profesor de la Universitat Jaume I de Castelló, dedicó su conferencia al poeta ‘Omar Jayyam ¿místico o blasfemo?’. La jornada de ayer finalizó con un coloquio entre líderes religiosos, en el que los representantes de las comunidades cristiana, hinduista, budista, judía e islámica hicieron especial mención de la hospitalidad como base de todas las religiones y pilar fundamental para la concordia y la convivencia, justo antes de acudir a la Catedral para ver el Santo Grial.
Entrega de premios y actos finales de la Multaqa
Mañana por la mañana tendrá lugar la entrega de premios Concordia Mediterráneo en el Hotel Balneario Las Arenas, en el que estará presente el presidente de la Fundación Cultura de la Paz, Federico Mayor Zaragoza. El acto concluirá con un desfile de moros y cristianos en el exterior, a lo largo del Paseo Marítimo. Por la tarde y la mañana del domingo tendrá lugar el Foro Islam y Convivencia en el Centro Cultural la Beneficiencia.
Retransmisión en directo
Sábado 3 de junio de 2017
Premios ‘Concordia Mediterráneo’
https://youtu.be/Uz3VM0mJS4c